Las habilidades blandas son aquellas capacidades relacionadas con la ética, la actitud, la empatía, los dotes comunicativos u otros aspectos propios de la inteligencia emocional. No tienen nada que ver, pues, con nuestros conocimientos o capacidades técnicas pero son igual de importantes (o incluso más) para lograr el éxito profesional y también personal.
Os hemos seleccionado seis que pensamos que os puede ir bien para refrescar.
1. Liderazgo
Podéis desarrollar vuestra capacidad de liderazgo de diferentes maneras: como proveedor de recursos educativos nuevos, como persona de apoyo, como mentor o como visionario que puede aportar ideas ya de cara al curso siguiente. Los docentes con fuertes habilidades de liderazgo tienen un papel importante en las escuelas actuales pues su capacidad de planificación permite que tanto los alumnos como los otros maestros y equipo de dirección puedan trabajar plegados para conseguir objetivos claros y resultados educativos visibles.
2. Comunicación
Comunicar bien permite que los alumnos entiendan mejor aquello que los explicáis, es lógico, pero también los puede ayudar a progresar si os esforzáis en darles mensajes positivos y de apoyo, pues no hay nada más motivador que ver reconocido el esfuerzo.
Además, si pretendemos que los estudiantes sean comunicadores eficaces, los tenemos que dar ejemplo cada vez que nos ven interactuar con otros maestros, personal de la escuela o padres y madres y tener cura de las palabras y expresiones que usamos ante las niñas y niños.
3. Trabajo en equipo
Actualmente se pone mucho énfasis en las actividades colaborativas para que los alumnos aprendan a trabajar en equipo. Ahora bien, nada más ejemplificador que vernos a nosotros mismos en esta tarea. El trabajo en equipo en un entorno educativo implica que todos los docentes comparten unos objetivos similares y que se establezcan dinámicas para poder trabajar conjuntamente de cara a lograrlos.
4. Resolución de problemas
Sabemos que aquellas problemáticas que surgen tanto dentro como fuera del aula, pueden afectar negativamente los resultados de aprendizaje. Tanto si se trata de desescalar un conflicto como de resolver un problema de la vida que obstaculice el aprendizaje de un estudiante en concreto, tenéis que estar alerta para asumir el reto y saber cómo abordar de la mejor manera posible la situación.
5. Inteligencia social y emocional
El aprendizaje social y emocional (también denominado SEL) es básico para los alumnos y para los docentes, pues no podemos ayudarlos a aplicarlas si no somos los primeros al ponerlas en práctica. Pero para hacer esto, hay que tener claro cuáles son algunas de las más importantes:
– Conciencia y autogestión de las propias emociones y comportamientos. Esto incluye la capacidad de retrasar la gratificación, gestionar el estrés, controlar los impulsos y perseverar a través de los retos para lograr objetivos personales y educativos.
-Habilidades de relación. Ayudan a establecer y mantener relaciones sanas y gratificantes. Esto implica comunicarse con claridad, escuchar activamente, cooperar, resistir la presión social inadecuada, negociar el conflicto de manera constructiva y buscar ayuda cuando sea necesario.
– Toma de decisiones responsables. Es decir, actuar teniendo siempre presente las normas de comportamiento ético, qué es y qué no una conducta de riesgo por la salud y el bienestar de uno mismo y de los otros, y saber hacer una evaluación realista de las consecuencias de nuestras acciones.
6. Competencia Cultural
La competencia cultural es la capacidad de empatizar con quienes tienen diferentes orígenes o culturas. Ahora que en las escuelas cada vez hay más niños y niñas recién llegados de Ucrania, conviene recordar que no hace falta que los docentes seáis expertos en todas y cada una de las culturas que hay dentro de vuestra aula. Lo mejor es permitir que los propios alumnos compartan, poco a poco y a su ritmo, sus costumbres, tradiciones… en un ejercicio en el cual los estudiantes pueden aprender mucho sobre la empatía, la aceptación y la tolerancia hacia el otro.
Para saber más sobre las habilidades blandas en el ámbito de la educación, te recomendamos este artículo.
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