Muchos de los actuales dispositivos inteligentes almacenan datos relacionados con nuestra actividad. | Getty Images © Sompong_tom
Un dato es un valor, una representación simbólica (número, texto, etc) que se asocia a una entidad (a algo). Esto no tiene por qué tener valor por sí mismo (15, “Paula”) pero sí puede tenerlo en relación a otros datos en la asociación de esa entidad (por ejemplo esa entidad puede ser “la edad de la persona que sienta al lado” o “la persona que se sienta al lado”).
Una vez estan procesados, los datos pueden servir para obtener información, especialmente cuando se agrupan entre sí en una bases de datos.
Una base de datos es un conjunto ordenado de datos. Las citas que hay en un calendario digital, el historial de canciones de Spotify, los gastos de una determinada empresa en un año o la recolección de información meteorológica del AEMET en una estación meteorológica serían ejemplos de bases de datos.
Hoy en día, diferentes aparatos recopilan muchos tipos de datos y tratan de obtener información a través de ella. Estos dispositivos recolectan datos bancarios, movimientos de trenes, temperaturas, velocidades de giro de motores y consumos eléctricos. Al recopilar y usar esos datos se puede obtener información relevante para muchas cosas.
Al procesar los datos, obtenemos la información. Y al unir las diferentes informaciones, obtenemos conocimiento. En la teoría de la información se considera que la diferencia entre un dato y una información es que el dato por sí solo no te permite tomar decisiones y la información sí.
ActiVIDADEs
- Para tomar decisiones necesitamos datos:
- ¿Qué tipo de datos necesitas saber para saber qué aspiradora o qué consola comprar?
- ¿Por qué son útiles esos datos y no otros?
- ¿Son los datos relevantes iguales para todos?