Promover la presencia femenina en los estudios tecnológicos, visibilizar las personas con espectro autista y crear un producto audiovisual moderno y entretenido que también sirviera para que los alumnos de los grados de Comunicación Audiovisual, Animaciones 3D, Juegos y Entornos Interactivos de la Universidad de Vic pudieran poner en práctica su aprendizaje y trabajar junto a profesionales. Este ha sido el triple objetivo de la websèrie LISA, una producción de Abacus para la Universidad de Vic.
LISA está protagonizada por la actriz y tiktoker Emma Cunill, y trata de una chica dentro del espectro autista que llega a la UVic para estudiar el grado de Ingeniería Mecatrónica. La Ingeniería Mecatrónica trabaja de manera interdisciplinaria los conocimientos de mecánica, electrónica, informática y control para formar profesionales con capacidad para concebir los nuevos productos industriales y de consumo que exige el siglo XXI.
Con un tono moderno y un guión entretenido, LISA pretende normalizar el autismo en el entorno universitario. Por eso, los creadores de la serie han recibido el asesoramiento de entidades como Asperger.cat. De hecho, la actriz Emma Cunill, que es una persona del espectro autista, hace tiempo que ha desarrollado esta mirada divertida y desacomplejada desde su TikTok personal.
Además, la serie, ha servido de formación a los estudiantes que han podido trabajar con un equipo altamente profesional, encabezado por las directoras y guionistas Ingrid de Santos y Raquel Barrera, con experiencia en este tipo de formatos, con una mirada atrevida y en clave de humor, y con el productor ejecutivo y director de contenidos de Abacus, Marc Roma.
De esta mezcla entre profesionales y estudiantes ha salido LISA. Durante cuatro capítulos de 5 minutos de duración veremos cómo una joven estudiante dentro del espectro autista, empieza el primer curso del grado en Ingeniería Mecatrónica a la UVic con toda la ilusión del mundo, pero también con todo el miedo por no saber cómo encajará su condición a la hora de tejer relaciones con sus compañeros y profesores.
Las personas con Trastornos del Espectro Autista (TEA) pueden tener una gran variedad de manifestaciones diferentes. Es posible que no interpreten los códigos relacionales de manera adecuada y por eso en un contexto de interacción social se pueden generar situaciones diversas: un gesto, una mirada, una frase con doble sentido, pueden ser interpretadas de manera muy diferente y provocar situaciones extrañas o incómodas. Por eso cuando empieza el curso Lisa se plantea si será aceptada. ¿Podrá hacer nuevas amistades? ¿Tendrá que disimular su condición? Lo descubriréis a lo largo de la serie.